La domótica ofrece un amplio abanico de opciones que puedes utilizar en tu vivienda. Hay aparatos de todo tipo, los cuales te permiten automatizar tareas, controlar dispositivos de forma remota o incluso ahorrar energía. En este artículo, vamos a hablarte de algunos usos interesantes que puedes darles a los sensores de movimiento. Vas a ver que pueden ser muy útiles si los utilizas en tu vivienda.
Básicamente, un sensor de movimiento inteligente detecta cuándo hay presencia. Puede detectar movimiento humano, la entrada de un vehículo en un garaje o incluso de mascotas. Esto te puede venir bien por diferentes motivos, como vamos a explicarte. Puede ser realmente útil en determinados casos.
Para qué usar sensores de movimiento
Los puedes ubicar en cualquier lugar. Por ejemplo, los puedes poner en la puerta de entrada, en una ventana, en alguna habitación… A partir de ahí, pueden estar vinculados a otros dispositivos e incluso recibir alertas en tu móvil, sin importar dónde te encuentres.
Seguridad
En primer lugar, un sensor de movimiento puede ser útil por seguridad. Puede ayudarte a detectar si un intruso entra en tu vivienda, si se ha abierto una ventana o puerta, etc. Lo ideal es que lo pongas en zonas sensibles, como puede ser junto a la puerta de entrada, ventanas o cualquier lugar que pueda abrirse. Estos sensores de movimiento los puedes vincular a cámaras de seguridad y otros sensores o dispositivos diseñados para proteger tu vivienda. Te ofrecen un amplio abanico de opciones y sí, pueden ser interesantes para mejorar la protección.
Actualmente puedes comprar este tipo de dispositivos con diferentes tecnologías inalámbricas para comunicarse, por ejemplo, podemos tener los modelos con Wi-Fi que consumen bastante batería. También tenemos los modelos que son ZigBee y Bluetooth, ambos protocolos nos permitirán ahorrar mucha batería, por lo que es ideal para no cambiar las pilas continuamente.
Encender luces de forma automática
También son útiles para encender luces cuando detectan presencia. Los puedes ubicar en cualquier lugar, como puede ser la puerta de entrada a una vivienda, un garaje, una habitación, un pasillo… Cuando detecte que hay movimiento, automáticamente se encenderán las luces. También se apagarán cuando no haya presencia. Esto es interesante para ganar en comodidad. Por ejemplo, podrías entrar en un garaje con cajas en las manos y no querer soltarlas para pulsar el interruptor. Al detectar que te acercas, se encenderán las luces sin que tengas que hacer nada.
Hay diferentes tipos de sensores para detectar los movimientos, los más baratos son los que funcionan por infrarrojos, aunque ten en cuenta que solamente detectará el movimiento y no la presencia. Si te quedas quieto durante un tiempo, el detector de movimiento no detectará nada y podrían apagarse las luces si es que las tienes configuradas de esta manera.
Encender ciertos aparatos
Algo similar puede ocurrir con otros aparatos que tengas en casa. Por ejemplo, un sensor de movimiento podría iniciar algo que tengas configurado, como puede ser encender la calefacción cuando entres en casa, poner a calentar el café cuando detecte que has entrado en la cocina por la mañana, etc. En este sentido, la domótica permite muchas opciones gracias a tener detectores de movimiento inteligentes. Únicamente necesitarás tener dispositivos compatibles y todo bien configurado.
Lo mejor para aprovechar al máximo este tipo de dispositivos, es que sean compatibles con el sistema de domótica de Home Assistant, con el objetivo de que podamos «mezclar» diferentes dispositivos de diferentes marcas, y que tengamos todos ellos gestionados mediante la misma plataforma.
Ahorrar energía
Al poder encender luces o aparatos de forma automática, también podrás ahorrar energía. No vas a necesitar tener cosas encendidas todo el tiempo, sino que se apagarán cuando realmente no las vayas a usar. Esto permitirá consumir energía únicamente por el tiempo imprescindible, lo cual supondrá un ahorro. Por tanto, podemos decir que los sensores de movimiento también serán útiles para ahorrar en la factura de la luz. Claro, debes utilizarlos correctamente y aprovecharlos al máximo. Asegúrate siempre de ubicarlos bien.
En definitiva, estos son algunos usos que puedes darle a los sensores de movimiento en casa. Te ayudarán a ahorrar energía, vincular otros aparatos o incluso mejorar la seguridad. Eso sí, asegúrate de evitar aparatos de domótica de mala calidad. Si vas a instalar este tipo de sensores en tu hogar, nuestra recomendación es que uses un sistema de domótica como Home Assistant, donde puedas centralizar el estado de todos ellos y poder realizar automatizaciones avanzadas, donde podamos interactuar con todos los clientes inalámbricos que nosotros queramos. Además, podrás realizar automatizaciones para activar todos los sensores a modo de alarma casera, y poder activar y desactivar la alarma en función de la ubicación GPS de nuestros dispositivos móviles. De esta forma, si todos los miembros de la casa están fuera, automáticamente nos enviará una notificación al móvil con el objetivo de que conectemos la alarma, o bien que se active automáticamente sin nuestra intervención.