Móvil y PC por cable: aprende a crear una conexión y tener Internet
![compartir Internet desde el móvil](https://www.redeszone.net/app/uploads-redeszone.net/2021/08/compartir_internet_movil_destacada.jpg)
Cuando pensamos en compartir Internet entre un PC y un smartphone habitualmente optamos por crear un punto de acceso Wi-Fi. Seguramente ésta sea la opción más sencilla ya que no requiere del uso de ningún cable para navegar por la red de redes y disfrutar de otros servicios. Además, hay que tener en cuenta que, a menudo, no llevamos con nosotros el Cable USB que necesitamos para hacerlo, porque frecuentemente no llevamos el cargador con nosotros. En este tutorial vamos a explicar cómo compartir Internet entre el móvil y PC por cable, cuándo nos conviene hacerlo así y por qué en algunas ocasiones puede ser más seguro.
Lo que vamos a tratar de hacer es convertir nuestro smartphone en un router para tener conexión a Internet. De esta manera, tendremos la oportunidad de compartir la conexión con otros dispositivos de casa o cuando estemos fuera de la vivienda y no podamos usar la conectividad del router. Por lo tanto, vamos a explicar qué cables necesitamos, cómo conectarlos y qué pasos tenemos que dar en Windows, así como en los sistemas operativos para móvil.
Por qué es interesante conectar un móvil y PC por cable
Aunque sea más cómodo crear un punto de acceso de Wi-Fi en el smartphone hay ocasiones en que no es lo más adecuado o seguro. Una de las razones puede ser porque los PC de sobremesa habitualmente no cuentan con una tarjeta Wi-Fi con la que poder conectarse a Internet. Esta clase de equipos generalmente se conectan por cable de red Ethernet. Como los smartphones sólo tiene puerto USB y el PC también, esta va a ser la forma en que ambos pueden conectarse.
Otro motivo por el que prefieres conectar por cable a tu PC o portátil puede ser por motivos de seguridad. Por ejemplo, si te encuentras en una zona pública con mucha gente a tu alrededor. Alguien podría ver tu clave Wi-Fi cuando la introduzcas o intentar hackear tu red Wi-Fi portátil. En caso de tener una clave robusta para nuestra conexión inalámbrica se minimizaría la amenaza. Y todo porque no aparece la conexión de tu smartphone de manera inalámbrica, ya que estará vinculada con tu PC.
Otra de las razones es para obtener una mayor velocidad de conexión. Las redes Wi-Fi van evolucionando, quizás nuestro PC o portátil no tenga una tarjeta Wi-Fi de 5GHz que soporte la banda de 5GHz, con lo cual, es posible que a lo mejor perdamos velocidad de conexión. Esto va evolucionando constantemente, y aunque nuestro equipo actualmente esté preparado, le va a tocar lidiar con este problema. La razón es que vendrán las redes en la banda de 6 GHz y las sucesivas. Quizás en el momento actual no te interese, pero en el futuro, según la tarea que estés realizando igual te compensa conectar el móvil y PC por cable USB.
Por tanto, como has podido ver hay diferentes motivos por los que puede ser interesante compartir Internet del móvil al ordenador a través de cable y no mediante red inalámbrica. Mayor estabilidad, velocidad o seguridad son los fatores principales. A continuación, vamos a explicar qué vas a necesitar para poder llevar a cabo este proceso.
Elementos necesarios y colocación
Para llevar a cabo este proceso en concreto es necesario tener en cuenta una serie de aspectos clave. De lo contrario, no podrás proceder a compartir Internet desde tu móvil al PC por cable. Por ello, si quieres tener la oportunidad de conectarte a Internet vamos a necesitar tres cosas mediante cable, estos son los puntos que debes conocer:
- Un PC de sobremesa o portátil con un puerto USB disponible. Actualmente mínimo que sea versión 2.0 pero si es una versión posterior, mejor. También, cuanto más potente y moderno sea, mejores velocidades de conexión podemos obtener. En este caso, vamos a utilizar uno con sistema operativo Windows 10.
- El cable USB correspondiente en función del PC y el smartphone.
- Un smartphone con Android e IOS.
El primer paso que tenemos que hacer es localizar un puerto USB disponible en nuestro portátil o en el PC. En este último se pueden localizar tanto en el frontal como en la parte trasera del mismo. Este es el ejemplo de un puerto USB tipo A de un portátil situado en un lateral:
En un PC también tiene la misma forma, son los de tipo USB que hemos usado durante más años. Actualmente, en algunos equipos se está viendo como están siendo sustituidos por los USB tipo C más pequeños. El otro elemento que necesitamos es el cable USB. Los smartphones Android más antiguos o de gama baja utilizan un conector micro USB y lo más modernos son USB tipo C.
En cambio, los smartphones con iOS tienen un conector Lightning. Aunque, todo dependerá del modelo de iPhone que tengas. Y es que desde el iPhone 15, todos los modelos de Apple deben llevar el puerto USB C. Por lo que también deberás usar este cable en concreto y no el propio de la firma estadounidense.
El proceso de colocación para conectar móvil y PC por cable es muy sencillo.
Tras encontrar un puerto USB libre del ordenador que vamos a utilizar introducimos el cable USB por el extremo correspondiente. A continuación, insertamos el conector correspondiente en el smartphone, en este caso es USB tipo C.
Es importante que el cable que vayas a utilizar funcione correctamente y que no tenga ningún problema. Debe de estar en perfecto estado y ser de calidad, ya que eso te garantizará un funcionamiento pleno, evitará problemas y tendrás una buena conexión. Así lograrás una velocidad adecuada y no tendrás cortes de red.
Configuración de un smartphone Android
Una vez que tenemos conectado correctamente móvil y PC por cable USB, es el turno de configurar nuestro smartphone Android. Lo primero que vamos a hacer es activar los datos móviles en caso de estar apagados. Seguidamente dentro de Ajustes, tenemos que buscar un apartado que suele llamar:
- Redes e Internet.
- Conexión y compartir.
- Otras conexiones inalámbricas.
Hay que tener en cuenta que estos apartado de Android pueden variar en función de la capa de personalización que tengas en el móvil. Por ejemplo, en Samsung está One UI, en Xiaomi está MIUI, etc. Así que los nombres de los apartados dentro de ajustes pueden variar. En cualquier caso, este sería un ejemplo de uno de los anteriormente mencionados:
A veces, después suele venir una pantalla intermedia que se llama «Zona Wi-Fi / compartir conexión» o «Punto de acceso portátil«. En el caso del smartphone que he utilizado venía directamente:
Aquí lo que hay que hacer es activar «Compartir datos por USB«. Otras denominaciones que también recibe son «Compartir conexión por USB» o «Compartir por USB«. Si no lo encuentras puedes probar a utilizar el buscador de Ajustes representado con el icono de la lupa. Tienen que ser unos nombres muy parecidos a los que he puesto.
Ten en cuenta que estos pasos pueden variar en función de la versión de Android de tu smartphone o tablet. Y también, como decíamos anteriormente, de la capa de personalización. ¿Qué es la capa? Es el sistema operativo que usa cada fabricante basado en Android. Por ejemplo, puedes encontrar One UI, MIUI, etc. Algunos teléfonos tienen una capa más pura, por lo que se asemeja a lo que lleva siendo Android toda la vida, como pueden ser los Pixel o Motorola. Por tanto, debes saber que pueden variar estos pasos, aunque en general, este proceso te servirá de guía.
Configuración de un smartphone con iOS
Aquí se recomienda tener la última versión de iTunes en el PC. Luego, conectamos el móvil y PC por cable USB. A continuación, vamos a Ajustes y pulsamos en el apartado Punto de Acceso Personal. El siguiente paso es seleccionar Permitir a otros conectarse. Entonces se conectará a tu ordenador por WiFi, Bluetooth o USB dependiendo de cómo tengas conectado el smartphone.
En este caso será por USB al estar conectado el cable. Puedes usar tanto el cable lightning como el cable USB C de los iPhone (en función del modelo de iPhone que tengas, tendrás que usar un cable u otro, ya que el puerto cambia). Por lo que no debes preocuparte por esto. Todo dependerá del puerto que tenga tu teléfono de Apple. Eso sí, debes tener en cuenta que tu PC debe tener puertos USB de sobra.
Y cuando te pregunte: ¿confiar en esta computadora?; pulsaremos en Confiar. A partir de ahí ya habrás dado permiso para que el equipo se pueda conectar a la red del móvil. Un punto que debes tener en cuenta es que debes tener sí o sí los datos móviles conectados. Una de las ventajas de este sistema operativo es que no ha cambiado en gran medida con el paso de las actualizaciones. Por lo que estos mismos pasos los podrás seguir en una versión más reciente de iOS, al igual que no hay diferentes capas de personalización en las que los pasos puedan ser distintos.
Al contrario que los móviles Android, los iPhone no permiten compartir la conexión WiFi a la que estás conectada con el teléfono. Es decir, si estás conectado con el iPhone a una red inalámbrica, no será esta la conexión la que vayas a compartir con otros dispositivos. Por lo tanto, si no tienes gigas móviles ilimitados o una buena cantidad de GB en tu tarifa móvil, no te podrás beneficiar de esta funcionalidad, ya que no te permitirá activar el punto de acceso. Además, si tienes una tarifa con datos limitados, debes tener presente qué vas a hacer, ya que en función de lo que hagas los GB se consumirán más rápido.
Configurando Windows para usar el móvil y PC por cable
La parte de Windows es igual, independiente de que nuestro smartphone tenga sistema operativo Android o iOS. En este caso hemos utilizado un PC con Windows 10. Lo que va a suceder tras la configuración del smartphone es que Windows detectará automáticamente una nueva red. Entonces aparecerá una pantalla como esta:
Aquí tenemos que elegir si queremos una red pública o privada. En caso de pulsar en «sí», tu PC o portátil será visible para el resto de equipos conectados a la red.
Ahora mismo, ya tendríamos móvil y PC por cable además de con conexión a internet. El problema está en que las tarifas móviles en su gran mayoría cuando consumes todos los datos móviles te van a reducir la velocidad. Lo harán de tal manera que la navegación por Internet se hará muy lenta. Por lo tanto, lo que toca es limitar esa red para que el consumo de datos no se dispare y nos quedemos sin ninguno. Para ello seguiremos estos pasos:
- Menú de inicio.
- Configuración de Windows.
- Red e Internet.
- A la izquierda hacemos clic en Ethernet.
Seguidamente aparecerá una pantalla como la siguiente:
Pulsamos sobre Red 2, que, si os fijáis, fue la que se creó al conectar el móvil y PC por cable USB. Una vez dentro os saldrá una pantalla como está:
Por último, lo que tenemos que hacer es activar Establecer como conexión de uso medido y establecer el límite de datos que queramos. Con esto evitarás que se consuma la tarifa de Internet y puedas tener problemas. Simplemente con descargar un gran archivo o reproducir un vídeo en alta definición puedes consumir bastantes datos y agotar en cuestión de minutos tu tarifa de datos móviles mensual.
Impacto en el rendimiento
Cuando compartimos la conexión a Internet desde los dispositivos móviles hacia un ordenador mediante un cable, establecemos una conexión de red que afecta a la velocidad de la conexión a Internet. Pero eso no es todo, sino que la capacidad de procesamiento de ambos equipos, se puede reducir. La velocidad de esta conexión, se verá afectada por las limitaciones del ancho de banda. Si la conexión es lenta en el dispositivo móvil o limitada, ocurrirá lo mismo en cualquier equipo que le conectemos.
Por otro lado, utilizarlos de forma simultánea, requiere de un ancho de banda relativamente alto. Una vez establecida la conexión, puede darse el caso de que un simple video en alta definición ocupe todo el ancho de banda. Y hay que tener presente que el nivel de batería de tu móvil puede influir, ya que si se está agotando, el rendimiento de la conectividad también se verá afectado.
Por otro lado, el procesamiento de los equipos se puede ver afectado. En primer lugar, tenemos la carga adicional que le estamos solicitando a la CPU y a la memoria RAM. En este caso, al utilizar el móvil como fuente de Internet, intercambiar los datos por un cable, puede incluso aumentar la carga de trabajo, más si cabe, en el procesador y la RAM del propio ordenador. La otra parte. Esto sin duda, es algo que afecta a las capacidades del equipo para poder realizar diferentes tareas de una forma simultánea.
También es importante mencionar, que la calidad del cable que utilicemos debe ser la adecuada para compartir la conexión a Internet. Si este es de mala calidad, puede que tengamos alguna pérdida de datos, o latencias muy grandes a la hora de transferir datos. Lo cual, afecta a la velocidad de conexión a Internet, y rendimiento de forma general. Por lo cual, compartir conexión por cable entre un móvil y un ordenador, a pesar de que es algo que nos puede librar de algún apuro, afecta al rendimiento de los equipos. En todo caso, es algo que depende mucho de la calidad del material que estemos utilizando en todo momento. En este caso, prestando especial atención al cable de datos.
Cable de conexión
Poder realizar este tipo de conexiones entre un ordenador y un teléfono móvil, es una solución muy práctica que nos puede ayudar en muchas ocasiones y quitarnos de un apuro. Pero aquí entra un factor que va a marcar mucho el rendimiento, y es el cable, como mencionamos al final del punto anterior. Por lo general, actualmente se suelen utilizar cables USB-C a USB-C, o cables USB-C a USB-A de alta calidad y con certificación de datos USB 3.0 o superior. Estos nos ofrecen las mejores velocidades a la hora de transferir datos. Cuando utilizamos cableado de baja calidad, es probable que tengamos interrupciones en el servicio, así como otros problemas de funcionamiento durante la transferencia de datos.
Pero el cómo el cable puede aportar un buen o mal rendimiento, depende mucho de cómo utilicemos la red en ese momento. Lo más recomendable es evitar el uso muy excesivo de aplicaciones o servicios que requieren grandes cantidades de ancho de banda. Ya que esto es algo que afectará a la velocidad de forma general, y como consecuencia, a toda la conexión. Por lo cual, no es recomendable descargar grandes archivos, o realizar transmisión de video en alta definición. En estos casos, es probable que el propio cable nos limite en cierto modo.
Esto es algo que con el tiempo se puede solucionar. Cada vez más dispositivos cuentan con conexiones Thunderbolt en sus puertos USB-C, las cuales pueden proporcionar hasta 400 Gbps de ancho de banda. Lo cual sería más que suficiente en la gran mayoría de los casos donde esto se utiliza. El problema que nos vamos a encontrar aquí, es que de momento esta tecnología solo se presenta en ordenadores de sobremesa, portátiles o tabletas. Pero no está presente en el mercado de los teléfonos móviles, lo cual tampoco se espera que tarde demasiado en llegar. Con este tipo de cables y conexiones, lo más probable es que se puedan realizar conexiones a Internet, y a la vez poder utilizar el dispositivo y la conexión por cable de otras formas que hasta ahora era prácticamente imposible.
Alternativa sin cable
Lo más probable es que si estamos tratando de compartir internet entre nuestro móvil y un ordenador por cable, es que se trate de algo que no puede esperar. Pero puede darse el caso de que no siempre tengamos un cable encima que nos permita realizar esta conexión, o que surja cualquier problema con este. Por lo cual podemos utilizar otro método que si bien no es el más rápido, puede sacarnos de un apuro.
Y es que por Bluetooth también es posible compartir la conexión a internet. No es algo que se haga de forma muy común, pero tiene algunas ventajas que nos pueden ayudar. Su principal factor favorable es que este tipo de conexión no va a desconectar una posible red Wi-Fi a la que tengamos conectado nuestro móvil. Por lo cual la podemos utilizar para compartirla con otro aparato que no tenga Wi-Fi, pero sí cuente con Bluetooth.
El proceso suele ser muy sencillo, pues simplemente tendremos que acudir a los ajustes, y en el apartado donde creamos las redes Wi-Fi y compartimos la conexión, seleccionamos el hacerlo por Bluetooth. Por la contra, en el otro dispositivo tendremos que seleccionar el punto de acceso como si fuera una conexión por Bluetooth normal y corriente. Si todo funciona correctamente, la conexión se compartirá por este método. No tendremos una velocidad demasiado alta, pero es útil para momentos que no puede esperar como una emergencia o algún caso particular que requiera de una conexión a internet.
De todos modos, la velocidad de la conexión puede ir ligada a la versión Bluetooth que tenga nuestro dispositivo. Es probable que si tenemos un terminal más actual, esta se incremente un poco y resulte más útil en algunos casos que se requiere algo más de capacidad. Por la contra, si el móvil es muy antiguo, es posible que directamente esta opción no se encuentre disponible.
Además, esta alternativa por Bluetooth está disponible tanto para smartphones Android como iOS. Por lo tanto, dará el sistema operativo que tengas en tu smartphone, en ambos, podrás usar esta conexión inalámbrica si no quieres usar directamente el WiFi de tu teléfono para compartir los datos móviles.
Comparte Internet por satélite entre varios vecinos
Esos lugares de los que estamos hablando son zonas con poca población. Generalmente son pequeños pueblos, en los que poco a poco se va perdiendo población. Ahora en nuestro país, un término que se está acuñando mucho es el de «la España vaciada», no obstante, no es cosa que nos afecte sólo a nosotros, también les sucede a otros muchos países.
La situación es que en esos sitios no pueden contratar fibra óptica y a veces ni incluso ADSL, la única alternativa es conectarse a Internet vía 3G/4G/5G si es que tienen una cobertura decente, pero en la mayoría de los casos, la única solución es contratar Internet por satélite.
Este tipo de conexión de conexión de Internet funciona a través de la instalación de una antena parabólica en el tejado del domicilio, con la que se capta la señal emitida por el satélite. Desde esa antena parabólica, parte un cableado que llega al router del cual obtenemos conexión, ya sea por WiFi o a través de un cable de red Ethernet.
Entre las empresas que ofrecen internet por satélite tenemos:
Las velocidades de conexión de Internet por satélite actualmente son de 30 Mb o 50 Mb. En contraposición, tenemos las velocidades de fibra óptica que van desde los 100Mb a los 1000Mbps. A pesar de ser velocidades muy diferentes, nos encontraremos que las conexiones de Internet vía satélite cuestan más que las de fibra. Además, uno de los puntos débiles de las conexiones por satélite es la latencia de la propia conexión, la cual es superior a los 100ms en la gran mayoría de los casos.
Por otro lado, las grandes compañías telefónicas como Vodafone, Movistar u Orange no ofrecen Internet satélite. No obstante comercializan otros tipos de conexiones rurales como Vodafone One conecta, Movistar Internet Radio y Orange 4G en casa.
¿Compartir Internet por satélite entre varias casas es legal?
Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) es legal compartir internet. En el Blog de la CNMC comentan que es legal hacerlo, siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos que mencionaremos más adelante. Lo primero, la comunidad de vecinos no debe inscribirse en el Registro de Operadores. Además, debe cumplir una serie de condiciones:
- La red Wifi no debe estar abierta al público en general. Por lo tanto, el número de usuarios es limitado y no es masivo. En este caso es sólo para los vecinos que se vayan a conectar y con los que compartiremos la conexión a Internet.
- Los vecinos no tienen ánimo de lucro y entre todos pagarán los costes de la red. Evidentemente no se pueden obtener beneficios, ni se cobra por el uso y tampoco se revende, todo se pagará a partes iguales.
- La comunidad de vecinos no es la que presta el servicio de acceso a Internet mediante WiFi ni tampoco ofrece un servicio de atención al cliente.
Por lo tanto, se puede compartir Internet por satélite entre varias casas siempre y cuando se cumplan estas reglas.
Así puedes compartir Internet con los vecinos
Dependiendo de cómo sea tu casa y la de tus vecinos, tendremos que utilizar un determinado equipamiento de red u otro. Lo primero que debemos pensar es que el operador nos instalará un router Wi-Fi en nuestro hogar, el típico router Wi-Fi con doble banda simultánea para conectarnos con todos los dispositivos fácilmente. Una vez que tengamos conexión en nuestra casa, tendremos que pensar cómo llevar dicha conexión a la casa de nuestro vecino vía Wi-Fi.
Normalmente en las zonas rurales se construyen casas y no pisos, por lo que nuestros vecinos estarán justamente al lado a la misma altura, o separados varios metros de nosotros. Os vamos a recomendar diferente tipo de equipamiento de red si vas a necesitar compartir Internet con uno o varios vecinos.
Si tu vecino está pegado a tu pared con pared
Si tu vecino está pegado a ti pared con pared, es decir, en el caso de que las casas estuvieran situadas cerca, una decena de metros y con buena cobertura en su interior, podríamos utilizar un adaptador USB o PCIe para que el vecino pueda conectarse con sus ordenadores. Por ejemplo, son ideales para conectar nuestro PC de sobremesa o portátil.
El ASUS PCE-AC88 puede obtener el máximo rendimiento inalámbrico de tu router, porque dispone de cuatro antenas externas en configuración MIMO 4T4R. Además, ha conseguido velocidades reales de 750 Mbps, y en lugares alejados el rendimiento también es excelente.
Esta tarjeta ASUS PCE-AC58BT es una de las que mejor calidad-precio tienen. Además, ofrece un gran rendimiento ya que te permitirá conseguir velocidades de 107 MB/s e incorpora también Bluetooth 5.0. También consigue muy buenos resultados en lugares muy alejados del router Wi-Fi.
El TP-Link Archer T4U tiene una conexión USB 3.0, es muy similar en rendimiento al resto de otras tarjetas Wi-Fi de misma categoría. El rendimiento en términos de cobertura y velocidad es sobresaliente, y también la estabilidad de la conexión. La instalación en Windows 10 es sencilla ya que el sistema operativo la reconoce de forma automática.
En caso de que el vecino no consiga buena cobertura, lo más recomendable sería comprar un repetidor Wi-Fi doméstico, y colocarlo cerca de la pared contigua a la casa del vecino, para que amplíe la cobertura inalámbrica y no tenga problemas con ningún dispositivo que conecte. En estos casos, es muy recomendable comprar un repetidor Wi-Fi que sea triple banda simultánea, para que tengamos una banda de frecuencias dedicada específicamente a la interconexión y obtener el mejor rendimiento posible.
En este caso, nuestra recomendación pasaría por el AVM FRITZ!Repeater 3000 que tiene un gran rendimiento y dos puertos Gigabit Ethernet para la LAN.
También os tenemos que recomendar el NETGEAR EX8000 Nighthawk X6S, un equipo que tiene características muy similares y con un rendimiento realmente interesante. En caso de que no podamos conseguir buena cobertura con estos repetidores Wi-Fi, tendríamos que poner un AP emitiendo en la casa de origen, para poder conseguir nosotros buena cobertura.
Si tu vecino está en una casa separada a menos de 75 metros
Si el vecino está relativamente cerca, pero en casas separadas, puedes optar antenas y/o por puntos de acceso de exterior, alimentados por un inyector PoE o un switch PoE. Es una solución más cara pero funcionará la conexión al Wi-Fi perfectamente, en este caso, puedes optar por dos tipos de dispositivos:
- La antena simple emplea la mayoría de veces un conector RG58 o RP-SMA ara conectar el cable. Este lo conectaremos a nuestro router, punto de acceso o tarjeta WiFi. Este tipo de antenas son las más económicas, y son tanto de interior como de exterior. Las podemos adquirir para instalarlas en el interior o el exterior. En este caso para su funcionamiento requieren conectarlas equipo emisor y receptor mediante la utilización de cable coaxial. La configuración se realiza en ese equipo ya que la antena en si misma no tiene nada que podamos configurar.
- La antena con sistema embebido es una antena WiFi pero se diferencia de la anterior en viene equipada con una CPU en su interior. Esta clase de antenas llevan en su interior una pequeña placa base con su correspondiente procesador y memoria RAM. Gracias a este mini ordenador puede hacer funciones de enrutador, de repetidor o de punto de acceso.
En esta imagen podéis ver la diferencia entre una antena simple y una antena con sistema embebido.
En relación a compartir Internet por satélite entre varias casas generalmente vamos a usar las antenas con sistema embebido, es decir, con punto de acceso Wi-Fi de exterior.
Si estás relativamente cerca al vecino, puedes optar por un AP profesional de exterior con antenas omnidireccionales para que llegue a cualquier punto de la casa del vecino, e incluso para dar cobertura al jardín de tu casa.
Si estás más lejos, entonces tendrás que recurrir directamente a un punto de acceso de exterior con antena direccional, y situar un AP en origen y otro AP en destino, para que haya una conectividad correcta entre ambas casas.
Teniendo en cuenta que la velocidad de Internet es baja, no necesitarás demasiado ancho de banda en el enlace inalámbrico. Una vez que hayas realizado el enlace, basta con poner un router neutro en el hogar del vecino para dar cobertura a todo el espacio que tenga.
Si tu vecino está en una casa separada a más de 75 metros
Si tu vecino está muy lejos de ti, pero tienes visión directa a su casa, es probable que puedas conseguir un enlace punto a punto con equipos orientados específicamente a esta tarea. Uno de los mejores equipos que puedes comprar son los de Ubiquiti, ya sea su familia NanoStation, NanoBeam o cualquier otra, ya que es un fabricante muy utilizado por operadores WISP y tienen una gran experiencia.
Comprando dos unidades de este equipo, y usando el propio software de la marca, podrías conseguir enlaces a larga distancia de manera muy fácil, por lo que podrás compartir Internet con tu vecino por muy lejos que esté.
Por último, como habréis podido observar, tenemos bastantes dispositivos que podemos utilizar para compartir Internet por satélite, siendo los más los comunes los dispositivos PCI / USB, las antenas de exterior, los puntos de acceso con antenas omnidireccionales y también con antenas direccionales para llegar más lejos.
Conclusiones
En definitiva, como has podido ver es posible compartir Internet entre el móvil y el ordenador a través de un cable. Aunque lo habitual hoy en día es simplemente utilizar la red Wi-Fi para dar Internet de un dispositivo a otro, esta alternativa puede ser interesante en muchos casos. Uno de los motivos principales es poder mejorar la seguridad, ya que la conexión no va a viajar de forma inalámbrica y tendremos menos problemas.
Es algo que vas a poder hacer tanto desde un móvil Android como también iOS. Simplemente tienes que seguir los pasos que hemos mencionado y preparar tus equipos para que puedan compartir Internet con normalidad. Es importante utilizar un cable adecuado, que esté en buen estado y así lograr la máxima velocidad y que no aparezcan cortes.